Si al niño le describe un dolor de oído según lo mencionado, debería ser llevado al médico. Si es muy pequeño y llora insistentemente, es recomndable probar a presionar ligeramente con el dedo en su oído: el aumento del llanto o la irritabilidad durante esta pequeña prueba pueden indicar otitis. También se deberá acudir al pediatra si el niño tiene fiebre, vómitos, diarrea, un resfriado que no se cura o dolor de cabeza persistente. Pero es importante saber que en ocasiones las otitis dan pocos síntomas y el médico puede descubrirlas al examinar sistemáticamente el oído del niño durante una revisión.
LA OSTEOPATÍA EN LA OTITIS MEDIA
Las otitis medias suelen ser más frecuentes en niños que en adultos debido a que el cráneo del niño aún no ha terminado de desarrollarse y por tanto la trompa de Eustaquio se encuentra en una posición más horizontal. El osteópata puede ayudar mucho con diferentes técnicas para solventar el acúmulo de moco en dicha zona y enseñar a los papás varias técnicas como la que os recomendamos a continuación en el siguiente vídeo.